¡Por fin saco un hueco para publicar esta receta! De verdad que no sé cuánto tiempo hace que la tengo pendiente, pero entre las Navidades, el trabajo, los cambios que se están dando en mi vida, San Valentín y mil cosas más no he podido pararme a redactarla. Es una receta deliciosa, eso lo primero, la he repetido unas cuantas veces y cada vez me gusta más que la anterior, también he probado con varios ingredientes diferente y siempre queda espectacular. Claro que no podía ser de otra forma viniendo la receta de mi queridísima Chus, Nenalinda, a la que conocí al fin en persona este verano :D Ella publicó esta receta en su Instagram y en cuanto la vi supe que tenía que prepararla aprovechando la harina de castañas de Naiciña... menuda delicia! Pero es que además es una receta super facilita, así que no puedo hacer otra cosa que no sea recomendaros probarla y pasaros por el blog y las redes de Chus, porque tiene recetas espectaculares :D
Cómo hacer una bica de castañas
Ingredientes:
-4 huevos
-150gr mantequilla temperatura ambiente
-150 o 200gr de azúcar blanco
-200gr nata para montar o leche evaporada
-240gr de harina de castañas
-2 cucharaditas de levadura
Preparación:
Ponemos en el bol de la kitchen aid la mantequilla con el azúcar y batimos con el accesorio de globo hasta que blanquee y quede cremosa. Entonces añadimos los huevos de uno en uno sin parar de batir y procurando que la mezcla siga quedando cremosa. Es el momento de añadir la nata, batiendo a velocidad baja-media para que no salpique y batimos hasta que se incorpore completamente.
Es el momento de añadir los ingredientes secos, harina y levadura, batimos a velocidad muy baja lo justo para que se incorporen. Quitamos de la batidora y con una espátula terminamos de mezclar los posibles restos de harina que queden.
Vertemos la masa en el molde, yo he utilizado uno de silicona de 20 centímetros, y alisamos la superficie. Espolvoreamos un poco de azúcar por encima para que haga esa costra crujiente tan deliciosa y llevamos al horno precalentado a 160 grados durante unos 40-45 minutos, hasta que se dore y al pinchar con un cake tester éste salga sin restos de masa.
Cuando esté hecha la dejo enfriar 5 minutos en el molde y luego ya trato de desmoldarla para que termine de enfriar sobre una rejilla.
Ya veis qué corte tiene... una auténtica maravilla! La he probado con más y con menos azúcar, las dos me han gustado, podéis probar cuál es vuestro punto de dulzor perfecto. La he hecho con nata y con leche evaporada, lo mismo, las dos han quedado muy buenas, así que os animo a probar, a cambiar y a crear la versión que más se ajuste a vuestros gustos :)
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