¡Buenos días! Volvemos tras un periodo de desconexión forzosa... acompañado de unas jornadas pasadas por frío y agua. Y qué mejor que estas tortitas para un plan de invierno como este. Me flipan las tortitas, si me seguís lo sabréis porque no sé cuántas recetas diferentes tengo ya publicadas en el blog... pero estas no las había probado nunca. No sé por qué, quizá es que esperaba que no fueran tan ricas o que me daba pereza el proceso... aunque desde que tengo la Kitchen Aid me da menos pereza todo porque ella trabaja sola y es una maravilla, si tenéis una contadme si estáis tan encantados/as como yo con ella. El caso es que estas tortitas merecen el esfuerzo que conlleva, que tampoco es tanto, pero entiendo que da pereza ponerse a montar claras a la hora del desayuno. Superado ese obstáculo os aseguro que la textura ligera, esponjosa y burbujeante merece mucho la pena. El sabor es como el de unas tortitas tradicionales, aquí la diferencia y la clave está en la textura, que no dejará indiferente a nadie ;)
Cómo hacer tortitas esponjosas japonesas
Ingredientes (2 personas):
-3 huevos
-2 cucharadas de azúcar
-30gr leche
-1/4 cucharadita de aroma de vainilla
-40gr harina de trigo
-1 cucharadita de levadura
Preparación:
Separamos las claras de las yemas y montamos las claras a punto de nieve junto con el azúcar. Reservamos.
En otro bol batimos el huevo con la levadura, la vainilla y la leche. A continuación añadimos la harina y batimos de nuevo.
Ahora incorporamos las claras a la mezcla de yemas con movimientos envolventes y con cuidado de que no se baje la mezcla. Para ello añadiremos las claras en 3 o 4 veces.
Calentamos una sartén y ponemos un poco de mantequilla para que se derrita por todo el fondo. Añadimos dos cucharadas de masa y dejamos cocinar a fuego bajo durante unos minutos, con una tapa puesta. A continuación añadimos otra cucharada de masa y dejamos cocinar de nuevo unos cuantos minutos (es importante dejar que se cocinen a fuego medio-bajo bastante tiempo, para que no queden crudas por dentro). Le damos la vuelta con cuidado y cocinamos un minuto más por el otro lado. Servimos y acompañamos de lo que más nos guste. ¿Te animas a prepararlas? :)
Por cierto, es normal que al sacarlas del fuego y conforme pasan unos minutos se bajen y no queden tan altas, ocurre lo mismo que con un soufflé ;)