Banoffee cheesecake o tarta de queso con dulce de leche y plátano

¡Buenos días! Tenía esta receta pendiente desde hace un tiempo, pero tuve que repetirla varias veces hasta conseguir la textura y sabor que yo quería... y todos sabemos que lo que se cocina hay que comerlo, así que tuve que espaciar las distintas versiones de esta tarta para no acabar empachada. El caso es que por fin la tengo, la tarta de queso banoffee, una nueva versión de uno de mis postres favoritos, porque qué hay mejor que el plátano con dulce de leche y nata, ya os lo digo yo: ¡nada! Y esta tarta lleva el banoffee dentro y encima, ya que en la cheesecake podemos encontrar plátano y dulce de leche y sobre esta base se construye un banoffee tradicional. Así que si sois tan fans de estos ingredientes como yo no esperéis más y probad esta tarta, no dejará a nadie indiferente :D

Cómo hacer un banoffee cheesecake o tarta de queso con plátano, dulce de leche y nata

Ingredientes (molde 18cm):

-1/2 paquete de galletas
-2 cucharadas de mantequilla
-1 pizca de sal

-440gr queso de untar
-100gr azúcar
-1 huevo
-1 o 2 plátanos si son pequeños
-Dulce de leche al gusto

-Dulce de leche al gusto
-1 o 2 plátanos si son pequeños
-Chocolate negro rayado o cortado en cubitos

-200ml nata
-100gr queso de untar
-3 cucharadas de azúcar

Preparación:

Empezamos preparando la base, trituramos las galletas, añadimos la mantequilla y la sal y mezclamos con las manos hasta que quede textura de arena mojada. Cubrimos todo el molde y un poco las paredes (yo lo forro con papel antiadherente).

Seguimos con la cheesecake, para ello en un bol batimos el queso con el azúcar hasta que quede cremoso, no hay que añadir aire, es batir lo justo para mezclar los ingredientes y que no queden grumos. Añadimos el huevo y batimos de nuevo. Llevamos la 3/4 partes de la mezcla al molde y por encima añadimos el plátano cortado a rodajas (más o menos hasta cubrir la superficie) y encima de éste unas cuantas cucharaditas de dulce de leche repartidas por encima de todo el plátano. Cubrimos con el resto de la masa de cheesecake con cuidado y despacio, para no llevar el plátano al fondo. Horneamos a 170º durante 45 minutos o hasta que veamos que se ha dorado ligeramente la superficie y que está casi cuajada, pero el centro aún se mueve. Apagamos el horno y abrimos ligeramente la puerta, dejamos reposar 15 minutos. Pasado el tiempo quitamos la tata del horno y dejamos enfriar por completo.

Cuando la cheesecake esté completamente fría seguimos con la tarta. En un bol ponemos la nata con el azúcar y batimos hasta que se monte completamente y esté bien firme. En otro bol batimos el queso hasta que quede ligeramente cremoso, lo incorporamos a la nata ayudándonos de una lengua de gato y con movimientos envolventes.

Es hora de montar la tarta. Ponemos la cheesecake en el plato donde la vayamos a servir. Encima le ponemos una capa de dulce de leche, procurando no llegar hasta el borde. Encima colocamos rodajas de plátano hasta cubrir todo el dulce de leche (y sin llegar al borde de nuevo). Ahora ponemos la capa de nata (podemos ponerla toda o una parte y servir el resto con cada porción, así lo he hecho yo). Encima rallamos el chocolate negro y lo espolvoremos para que quede armonioso. Finalizamos calentando un poco de dulce de leche en el microondas y estirando unas líneas con ayuda de una cuchara.

Aunque es un poco trabajosa os aseguro que esta tarta merece la pena. Espero que si la hacéis me contéis vuestra experiencia :D