Flan de queso

Aquí estamos de nuevo y con otro flan! Ya os dije que no era mucho de flan de huevo... pero sí que me encanta el flan de queso. Y todo gracias a Noe y las cenas universitarias entre psicólogas. Noe hacía con su thermomix un flan de queso espectacular, le salía genial y me ponía las botas cada vez que tocaba cumpleaños o cena y preparaba este delicioso flan. La verdad es que se echan de menos las cenas con las amigas de la carrera, más en estos momentos de morriña. Pero bueno, el caso es que fui a la tienda al lado de mi casa a hacer la compra y tenían queso de untar, así que ahí que me fui con una tarrina (de una marca que ni conocía y que solo había 1 de 200gr) y simplemente repliqué la receta anterior añadiéndole queso. Tenía mis dudas de si cuajaría igual, pero como el queso era entero y bastante denso supuse que no variaría mucho la textura... y no me equivoqué! Mmmmmmmm delicioso! La textura cremosa que le da el queso y ese sabor tan suave es una auténtica maravilla :D

Cómo hacer flan de queso

Ingredientes:

-500ml leche (yo desnatada)
-4 huevos
-200gr de queso de untar (entero, no light)
-40gr stevia en granos
-Caramelo para el fondo del molde (yo utilicé el que ya viene hecho de Royal)

Preparación:

Lo primero preparar el molde con el caramelo. Yo utilicé un molde desechable y el caramelo que ya viene preparado, porque tengo un bote desde hace mucho que quiero terminar, así que me viene perfecto. Si lo preferís podéis utilizar el clásico molde para flan, quedará más bonito, o incluso la flanera con tapa para que no se reseque la superficie del flan.

Ahora batimos el queso con la stevia (podéis poner 150gr de azúcar) hasta que se ablande. Entonces añadimos los huevos y batimos hasta que no queden grumos.

Calentamos la leche en el microondas hasta que esté bastante caliente. Entonces la añadimos al otro bol sin parar de batir para que no se cuajen los huevos.

En una fuente amplia ponemos agua bien caliente. Echamos nuestra masa de flan en el molde con caramelo y metemos este molde en la fuente con agua. Llevamos al horno precalentado a 150º durante 45 minutos aproximadamente, hasta que al pinchar con un palillo éste salga limpio.

Sacamos del horno y dejamos enfriar, cuando esté frío lo pasamos a la nevera. Mejor comerlo de un día para otro. Para ello pasamos un cuhillo para despegar el borde y con mucho cuidado le damos la vuelta sobre una fuente. Y listo! No tiene más misterio y es delicioso :D