lunes, 1 de abril de 2019

Tarta de chocolate, plátano y dulce de leche

Buenos días! Hoy os traigo una tarta que... mmmmmmmm... solo de pensarlo se me hace la boca agua!!! Madre mía lo buena que está! Que ya sé que está mal que yo lo diga, pero oye, que de 9 que somos en el trabajo a 8 les encantó y tan solo una persona dijo que prefería la versión beta a esta versión (sí, queridos y queridas, hago versiones beta y luego las mejoro, todo ello antes de publicar en este blog!). Se trata de una base de chocolate y plátano, endulzada de forma natrual con dátiles medjoul que queda jugosita, nada empalagosa y con un sabor a chocolate y plátano exquisito. Pero claro, no podía ser de otra forma, porque la receta es una adaptación del libro de Aliter Dulcia, Pasteles con historia, que si no lo conocéis ya tardáis en pedirlo en Amazon o en vuestra librería más cercana! El caso es que partiendo de ese bizcocho se me ocurrió convertirlo en una versión de uno de mis postres favoritos, la tarta banoffee, y aquí la tenéis: bizcocho de chocolate y plátanos con una crema de dulce de leche pastelero, mucho plátano en rodajas y una ganache de chocolate para coronar este pastel que quita el sentido. Ya tardas en ponerte manos a la masa ;)



Cómo hacer un pastel de chocolate, plátano y dulce de leche


Ingredientes:

Para el bizcocho:

-2 plátanos pequeños
-1 huevo
-80gr de dátiles medjoul deshuesados
-20gr cacao puro en polvo
-40gr aceite de oliva
-40gr harina de trigo
-1 cucharadita de levadura
-1/4 cucharadita de sal

Para el relleno:

-Dulce de leche pastelero (que es más denso que el normal)
-Plátanos en su punto, ni muy verdes ni muy maduros

Para la cobertura:

-200gr de chocolate blanco para postres
-100gr de nata para montar

Preparación:

Empezamos por el bizcocho de plátano y chocolate.

Ponemos los plátanos en el vaso de la batidora, añadimos los dátiles y trituramos todo junto hasta tener una pasta. Reservamos.

Batimos en un bol los huevos hasta que empiecen a espumar, añadimos ahora el aceite poco a poco y sin dejar de batir. Añadimos la pasta de plátano y batimos de nuevo hasta que se mezcle todo.

Ahora añadimos la sal y el cacao (tamizado mejor) y mezclamos hasta tener el cacao completamente integrado. Por último añadimos la levadura y la harina (también tamizadas) y removemos de nuevo hasta tener una masa homogénea y bastante espesa. Ponemos la masa en el molde, yo utilicé uno de silicona de 24cm y llevamos al horno precalentado a 180º unos 15 o 20 minutos, al ser una capa fina se hará muy rápido, vigilad para que no se cocine en exceso. Estará lista cuando al pinchar con una brocheta ésta salga sin restos de masa líquida.

Ahora podemos hacer la crema o ganache, calentamos la nata hasta que hierva, quitamos del fuego (o del microondas) y añadimos el chocolate cortado en trocitos. Removemos bien con una cuchara hasta que todo el chocolate se haya derretido por completo. Entonces dejamos enfriar la mezcla.

Cuando esté bien fría (podemos meterla incluso un ratito en la nevera, tampoco mucho), la montamos con ayuda de una batidora de varillas. Cuando esté bien montada la pasamos a la manga pastelera, si vemos que no mantiene mucho la forma, llevamos la manga pastelera a la nevera 10 minutos o el tiempo que sea necesario hasta que la crema coja cuerpo y se puedan hacer las formas con ella.

Ojo con pasarse, si la dejáis mucho tiempo en la nevera se enfriará por completo y no saldrá por la manga pastelera, así que mejor quedarse cortos que pasarse!

Para terminar solo nos queda montar la tarta, ponemos el disco de bizcocho en el plato que vayamos a utilizar para emplatar. Cubrimos toda la superficie del bizcocho con una capa de dulce de leche pastelero, a continuación añadimos rodajas de plátano sobre el dulce de leche. Por último decoramos con la crema que tenemos en la maga pastelera, haciendo las formas que más nos gusten. Yo para decorar piqué un poco de chocolate negro y se lo añadí por encima a modo de lluvia, es totalmente opcional, podéis utilizar cacao en polvo, sprinkles... o directamente dejarla tal cual.

Ya veis que es una tarta muy sencillita pero resultona. Ideal ahora que empieza el calor porque no se hace demasiado pesada, sobre todo si la tenemos en una ambiente fresco.




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