Solomillo en salsa de Oporto

Buenos días! Toca plato salado de nuevo. Una auténtica delicia, siento decirlo así, pero lo es. Este plato  lo he comido unas cuantas veces (todas las que he podido) en uno de mis restaurantes favoritos de Santiago, es delicioso, desde el primer día que lo probé quise hacerlo, y me puse a investigar, mucho, investigué, y al final pasé a la acción, y el plato no sólo quedó como en el restaurante, yo creo que incluso mejor. No os voy a negar que la salsa hay que hacerla con tiempo, pero el resultado merece la pena con creces, y para estas fiestas creo que es un plato excelente. Esta vez lo he acompañado de unas patatas fritas, como lo como siempre en el restaurante, pero claro está que se puede acompañar de ensalada o de patatas duquesa como las que hice aquí. En la variedad está el gusto ;)

Ingredientes:

-Solomillo (cantidad en función de las personas)
-1 cebolla
-5 champiñones grandes (el doble o más si son pequeños)
-2 cucharadas de aceite de oliva
-1 pizca de sal
-1 pizca de pimienta molida
-200ml vino de Oporto
-2 cucharadas de bovril
-Caldo de carne

Preparación:

Empezamos siempre por la salsa porque es lo que más tiempo nos va a llevar.

Picamos la cebolla y los champiñones en trozos, mejor pequeños para que se pochen antes, pero luego pasaremos la salsa por la batidora así que si los cortáis grandes tampoco pasa nada.

Ponemos el aceite en una olla, cuando esté caliente añadimos la cebolla y champiñones, añadimos la sal y la pimienta y vamos dejando que se pochen a fuego medio-bajo.

Cuando ya esté pochadito todo le añadimos el bovril, removemos muy bien y seguidamente añadimos el Oporto. Removemos y dejamos que se evapore el alcohol a fuego medio-alto, unos 10 minutos aproximadamente.

Luego añadimos el caldo de carne, uno 300 mililitros, aunque puede ser menos, todo depende de la cantidad de comida, a mayor número de personas más salsa necesitaréis, estas cantidades da para 8 personas.

Una vez que añadimos el caldo de carne dejamos a fuego medio que se vaya evaporando poco a poco unos 20-30 minutos. Pasado el tiempo pasamos la batidora para triturar los trocitos de champiñón y cebolla. Si la salsa todavía está líquida la dejamos al fuego a que espese, el tiempo que le haga falta en función de lo espesa que queramos la salsa. En mi opinión el punto justo es cuando tiene cuerpo pero no es completamente espesa, sería como la nata líquida que compramos, para mi gusto es el punto perfecto.

El solomillo, en crudo, lo cortamos en filetes, y los hacemos a la plancha con un poco de aceite, salamos primero un poco los filetes. Cuando estén hechos los servimos en el plato regados con una generosa cantidad de salsa y el acompañamiento (en este caso las patatas fritas), aconsejo poner en una salsera más cantidad de salsa para que los invitados se vayan sirviendo más a lo largo de la comida.