Parrozzo d'Abruzzo

Buenos días! Hoy es mi día, sí sí, mi día para publicar en el Calendario de Adviento Gastronómico, algo que empezamos el año pasado y que nos gustó tanto que repetimos, eso sí, repetimos gracias a que Patri se lo curró mucho ya que es ella quien nos organiza a todos, así que mil gracias guapa por hacerte cargo de este calendario. En cuanto a la receta, me apetecía preparar algo italiano, tengo predilección por este país y su gastronomía, estuve buscando, el panettone ya lo hice el año pasado, el pandoro... me daba muuucha pereza, y otros platos que vi no me terminaron de convencer. Entonces llegué por casualidad a este, que no lo había visto en mi vida, y que resulta que es de lo más delicioso. Tiene un sabor a limón espectacular, una textura increíble (nunca había probado a usar sémola) y la combinación con esa capa de chocolate es de locura, vamos, que es de los de mojar-en-el-café y no parar de comer! No es nada difícil y el resultado es genial, así que os animo a meteros en la cocina y preparar este Parrozzo.

Y si quieres saber más sobre nuestro calendario gastronómico no tienes más que ir al blog de Patri y ver todas las recetas ya publicadas, además de poder participar en un fantástico sorteo!!

Ingredientes:

-180gr de sémola de trigo
-200gr harina de almendras
-180gr azúcar
-6 huevos
-Ralladura de dos limones
-1 pizca de sal
-200gr chocolate negro

Preparación:

Necesitaréis un molde semiesférico que pueda ir al horno, a ver, necesitar necesitar no, pero es la tradición, así como los budnt se hornean en un molde de bundt, el parrozzo se hornea en un molde semiesférico, yo lo hice en un bol de cristal resistente al calor. Lo untamos con mantequilla/aceite y espolvoreamos con harina para poder desmoldar bien el parrozzo una vez hecho.

Montamos las claras a punto de nieve con unas gotas de zumo de limón. Reservar.

Separamos las yemas de las claras. Montamos las yemas con el azúcar y la sal hasta que blanqueen y dupliquen su volumen (con batidora eléctrica, en esta receta la necesitaréis).

Añadimos la sémola, con una lengua de gato vamos incorporándola a la mezcla poco a poco. Añadimos también la harina de almendras y la ralladura de limón, poco a poco, y mezclando suavemente. No os asustéis, os quedará una masa muy compacta, casi como para hacer galletas, no la tiréis, se soluciona ;)

Es hora de añadir las claras. Añadimos un tercio de las claras montadas a punto de nieve, con la lengua de gato mezclamos muy muy bien hasta incorporarlas por completo a la masa, veréis que ya va ablandando. Ahora vamos añadiendo el resto de las claras poco a poco, en tres o cuatro veces, y revolviendo bien pero sin quitar el aire. Cuando ya tengamos una masa homogénea la ponemos en el molde, alisamos un poco la superficie y la llevamos al horno precalentado a 170º durante 50-60 minutos.

Pasado el tiempo, cuando veamos que está cocido por dentro (truco del palito, si pinchas y sale limpio es que está) lo desmoldamos con mucho cuidado y lo dejamos enfriar en una rejilla.

Cuando esté frío derretimos el chocolate y se lo ponemos por encima hasta cubrirlo por completo. Dejamos que endurezca la cobertura y ya lo tenemos listo para comer :)