Spaghetti con carne y zanahoria

Estos spaghetti son una receta de mi creación... más bien, intenté hacerla por lo que me acordaba de los spaghetti que mi madre me hacía de pequeña, y entre mis recuerdos y la intuición conseguí una receta parecida a la de mi madre y que está de muerte.

Ingredientes:

Spaghetti (cantidad según los comensales)

Una cebolla francesa

Zanahorias (según comensales, para una persona llega con una zanahoria media)

Perejil fresco o seco (yo uso seco)

Media pastilla de caldo de pollo

Filete de carne (yo utilizo un filetito o dos de cinta de lomo pero también vale pechuga de pollo o lo que tengáis a mano)

Aceite

Sal

Vino blanco

Procedimiento:

Lo primero que hacemos es sofreir un poco la carne, que previamente habremos cortado en cuadraditos pequeños, en una pota con aceite hasta que se dore un poco. Después le añadimos la zanahoria cortada en cuadraditos o tiritas pequeñas y la cebolla entera (en esta receta en concreto no me gusta encontrar los trozos de cebolla así que la cocino entera y luego la desecho). Echamos una pizca de sal y dejamos que se pochen bien pero sin deshacerse, que queden tiernitas.

A continuación echamos la media pastilla de caldo de pollo desmenuzándola con las manos, también le agregamos el perejil picado. Lo removemos todo y le añadimos un chorrito de vino blanco, subimos el fuego para que se evapore el vino.

Una vez que el vino está evaporado echamos agua en la pota hasta que nos llegue para cocer los spaghetti, la ponemos a fuego alto para que hierva.

Una vez que el agua hierve le echamos los spaghetti y los dejamos unos 10 minutos hasta que se cuezan. Una vez hechos sólo nos queda quitar la cebolla y servir en el plato los spaghetti.

El caldito que queda lo podéis echar en una salsera para acompañar con pan, o si sois como yo y no coméis pan, podéis aprovecharlo para una sopa o si no desecharlo.

Esta es la forma tradicional de hacerla, pero si tenéis una ogya de lékué podéis hacer la misma receta en ella, mucho más rápido y sencillo ;)